Mauro Icardi y la China Suárez habrían provocado la furia de Wanda Nara al tomar una decisión previa a su viaje a Argentina del 11 al 15 de noviembre. Aprovechando los días libres de Icardi por la fecha FIFA, la pareja visitará a las hijas que el futbolista tiene con Wanda, aunque imponiendo exigencias que molestaron al entorno.

Según "LAM", Icardi y Suárez se mudarían de la "casa de los sueños" en Nordelta antes de su llegada, instalándose en una nueva propiedad en el barrio San Jorge.

El viaje de Icardi no fue bien recibido por el Galatasaray, ya que el club considera que interrumpe su recuperación física.

Además, la visita generó un conflicto con Wanda Nara. Un juez le ordenó entregar a sus hijas durante esos días y prohibió sacarlas de Buenos Aires, lo que incrementó su malestar ante la posible presencia de la China Suárez en el encuentro. Angie Balbiani informó que Suárez podría acompañar a Icardi si él lo decide, aumentando la tensión. El entorno de Wanda Nara reaccionó con disgusto, buscando evitar un nuevo enfrentamiento mediático.

Para evitar problemas legales por su situación de deudor alimentario, Icardi tomó precauciones legales antes de viajar. Fuentes cercanas aseguran que no tendrá inconvenientes para regresar a Turquía, ya que la casa de Nordelta fue embargada por esa deuda, permitiéndole cumplir con los plazos establecidos.