Organismos de la ONU informan sobre el impacto de las operaciones militares israelíes en la población civil, especialmente en niños y mujeres.
La situación también ha afectado gravemente a las infraestructuras educativas. La agencia de la ONU para la infancia, UNICEF, informó que al menos 64 ataques contra escuelas se registraron en Gaza el mes pasado, con la mayoría de los ataques concentrados en el norte de la Franja, una de las áreas más golpeadas por los recientes bombardeos.
Se estima que 128 personas, muchas de ellas menores, murieron en estos ataques, y más del 95 % de las escuelas han sido parcial o totalmente destruidas.
La crisis humanitaria también se extiende al acceso a los alimentos. La Organización Mundial de la Salud (OMS) informó que el suministro de alimentos ha caído drásticamente, advirtiendo que una hambruna es inminente en el norte de Gaza, donde se concentran las operaciones militares de Israel.
Desde el inicio del conflicto, el número de camiones de ayuda que entran a Gaza se ha reducido drásticamente, de 500 diarios a apenas 58 en promedio durante la segunda mitad de octubre. Además, el precio de los alimentos ha aumentado un 312 %, lo que agrava la inseguridad alimentaria.
El Director General de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, describió esta situación como "profundamente alarmante" y urgió a facilitar de inmediato un acceso seguro a alimentos y medicinas para atender la crisis de desnutrición en Gaza.