La causa por el fallecimiento de Wenceslao Martín Quiroga en el Hospital Italiano de Guaymallén avanzó hacia una instancia clave. Tras revisar los argumentos presentados por cada parte, la jueza Dolores Ramón, del Juzgado Penal colegiado N°1, determinó que el cardiólogo Jorge Armando Cubillos Ferreyra (33) deberá ir a juicio por el presunto delito de homicidio imprudente.

La decisión se tomó en el marco de una audiencia de oposición, donde se discutió si existían elementos suficientes para habilitar el debate oral. En ese espacio, la magistrada escuchó a la fiscal de Homicidios Florencia Díaz Peralta, a las defensas y al abogado querellante que representa a la familia de la víctima. Tras evaluar cada planteo, rechazó todas las nulidades y dio luz verde a la elevación a juicio.

En la misma audiencia, la situación del jefe del Servicio de Cardiología, Miguel Ángel Montenegro Quiroga, tomó un rumbo distinto. Pese a estar imputado como coautor de homicidio culposo, la jueza consideró que no había sustento probatorio para sostener la acusación y ordenó su sobreseimiento.

El caso

Según la acusación fiscal, el hecho que originó el proceso ocurrió el 10 de junio de 2018, cuando Quiroga llegó alrededor de las 4 de la mañana a la guardia del Hospital Italiano. Fue atendido inicialmente por Montenegro, quien se desempeñaba como médico residente de cardiología y estaba de turno en la Unidad Coronaria.

El paciente presentaba síntomas compatibles con un tromboembolismo pulmonar masivo, diagnóstico que quedó asentado en la historia clínica. No obstante, la investigación sostiene que el médico de guardia no aplicó trombolíticos ni dispuso una cirugía de urgencia, alternativas que la Sociedad Argentina de Cardiología recomienda en casos de esa gravedad.

A las 5.30, Montenegro se comunicó telefónicamente con su superior, Cubillos Ferreyra, para informarle la evolución del paciente. De acuerdo con la acusación, el jefe de servicio no se presentó en el hospital ni habría indicado las intervenciones terapéuticas necesarias para intentar revertir el cuadro.

El estado de Quiroga se deterioró con el correr de la mañana y, pese a las maniobras posteriores del equipo médico, el hombre falleció cerca de las 10. Esa secuencia derivó en la apertura de la causa que, siete años después, se encamina hacia el juicio oral.