Una megaoperación en las favelas de Río de Janeiro ha resultado en lo que los medios locales están llamando el evento más sangriento en la historia del estado, con un recuento de víctimas que supera las 120. Comenzando al amanecer, los residentes llevaron cuerpos a la Plaza São Lucas en Penha, el epicentro de la violencia, después de intensos enfrentamientos entre la policía militar y presuntos narcotraficantes en el bosque de Vacaria.

Testigos describieron una escena de horror mientras docenas de cuerpos, algunos transportados por residentes en camionetas y otros cubiertos con telas ensangrentadas, fueron colocados en la plaza. Familiares en duelo buscaban a sus seres queridos, con el silencio roto solo por sollozos. Los residentes usaron guantes para cortar fragmentos de ropa para ayudar en la identificación.

Los datos oficiales inicialmente informaron al menos 60 muertes, en su mayoría presuntos miembros del Comando Vermelho, así como cuatro policías. Sin embargo, los cuerpos recuperados por los residentes sugieren un número significativamente mayor. El Hospital Estatal Getúlio Vargas informó que seis cuerpos no identificados permanecían bajo su cuidado. La Secretaría de la Policía Militar declaró que los cuerpos recuperados serían investigados y confirmó que equipos del BOPE fueron desplegados en la zona.

El activista social Raull Santiago publicó un video que muestra manchas de sangre y cuerpos en el bosque que conecta Complexo do Alemão y Complexo da Penha, expresando disgusto y devastación. Los residentes informaron sobre presuntas ejecuciones después de rendiciones a las fuerzas de seguridad.

Globo y La Nación informaron que el número total de muertos superó los 120, incluyendo civiles y presuntos delincuentes, de una operación dirigida al Comando Vermelho. Los residentes de Penha afirman que aún quedan cuerpos en la ladera, inaccesibles debido a la continua presencia policial. Vehículos funerarios comenzaron a retirar cuerpos de la plaza mientras cientos observaban, lidiando con la magnitud de la tragedia.