Crí­tico hacia las vacunas y difusor de teorí­as conspirativas, especialmente sobre las vacunas contra el COVID-1912, Robert F. Kennedy Jr., sobrino del asesinado expresidente John F. Kennedy, estará a cargo del Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos.

Abogado de profesión, con una larga carrera como activista medioambiental, Kennedy tiene 70 años y es hijo del senador Robert Kennedy.

En las últimas décadas se ha vuelto conocido por sus posturas crí­ticas hacia las vacunas y por difundir teorí­as conspirativas, especialmente sobre las vacunas contra el COVID-1912.

El presidente Donald Trump anunció la designación de Kennedy a través de su red social Truth Social, pero el nombramiento aún debe ser confirmado por el Senado3.

Kennedy habí­a sido candidato presidencial independiente, pero abandonó su campaña para apoyar a Trump.

Trump indicó que Kennedy buscará proteger a los estadounidenses de "productos quí­micos nocivos, contaminantes, pesticidas, productos farmacéuticos y aditivos alimentarios".

Kennedy prometió "limpiar la corrupción" en el departamento y terminar con las "puertas giratorias" entre la industria y el gobierno.

Propuso cambios radicales como prohibir anuncios de medicamentos en televisión y reorientar el enfoque hacia enfermedades crónicas.

El nombramiento genera controversia debido a las posturas antivacunas de Kennedy.

Algunos miembros de la familia Kennedy rompieron relaciones públicamente con él por sus opiniones sin fundamento cientí­fico.

Expertos en salud pública condenaron la decisión, mientras que algunos republicanos y demócratas han expresado sorpresa.