Tras el fallo de la Corte Suprema de Justicia que confirmó la condena por corrupción contra Cristina Fernández de Kirchner, las reacciones en Mendoza fueron inmediatas.
Lucas Ilardo, un referente del peronismo local, anticipó una larga lucha "que recién empieza".
Otros mensajes fueron más indirectos, apuntando a las divisiones internas de la UCR. Por ejemplo, Ignacio Conte, secretario de gobierno de Guaymallén, criticó a Martín Lousteau.
Hebe Casado, vicegobernadora cercana a La Libertad Avanza, vinculó a Emir Félix, presidente del PJ local, con la persona condenada, lo cual incomoda al sanrafaelino, ajeno al kirchnerismo.
En el ámbito gremial, la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), liderada por Roberto Macho, denunció una "proscripción".