En un intervalo de apenas tres días, la provincia de Mendoza vivió un período de alta violencia que dejó un saldo de cinco asesinatos, con víctimas que van desde una mujer de 66 años hasta un chico de 15 años, pasando por dos hombres de 22 y 34 años y otro hombre de 77 años. Los crímenes ocurrieron en diferentes localidades de la provincia, incluyendo Las Heras, Capital y Godoy Cruz. 

El primer caso fue el asesinato de Juan Emiliano Jofré, de 34 años, quien fue encontrado sin vida en calle Almafuerte al 1.300, en Las Heras. Según las investigaciones, Jofré estaba con un amigo cuando otro hombre fue a enfrentarlo en una discusión relacionada con problemas de drogas. El agresor sacó un arma de fuego y le disparó a muy corta distancia, hiriendo gravemente a la víctima. Cuando Jofré cayó, el autor escapó en segundos.

Otro caso atroz fue el asesinato de Guillermo Nicolás Quinteros, de 22 años, quien fue abatido cerca de las 22.30 del sábado en un enfrentamiento a tiros en el barrio Paulo VI, de Godoy Cruz. Quinteros no tenía antecedentes y estaba armado con guantes de látex. Según testigos, el móvil del asesinato estuvo relacionado con la venta de drogas. Los investigadores creen que Quinteros también disparó en medio del ataque, junto con otras personas que se llevaron su arma antes de que llegara la Policía.

También en la madrugada del sábado ocurrió el asesinato de un chico de 15 años, quien fue encontrado sin vida en una habitación de un hotel en el barrio San Martín, en Las Heras. La causa del crimen aún no ha sido determinada.

El cuarto caso fue el asesinato de una mujer de 66 años, quien fue encontrada sin vida en su casa en el barrio General Paz, en Capital. Según las investigaciones, la mujer había tenido problemas con drogas y se cree que el móvil del crimen está relacionado con esta actividad.

El último de los asesinatos fue el de Juan Antonio García, de 77 años, quien fue encontrado sin vida en el baño de su casa del barrio Esperanza III, en Godoy Cruz. Según las investigaciones, García sufrió un golpe en la cabeza y es posible que haya sido la causa de muerte. El crimen ocurrió tras un robo, ya que faltaba el televisor y otros elementos de la víctima.

A pesar del intenso trabajo investigativo, no hay detenidos en ninguno de los crímenes. Los investigadores siguen trabajando para determinar los motivos y circunstancias detrás de estos trágicos eventos.