La victoria nacional del oficialismo en las elecciones legislativas de octubre -incluida la provincia de Buenos Aires- revitalizó la figura del presidente Javier Milei y reanimó las expectativas de una parte importante de la sociedad. Así lo revela una nueva encuesta de la consultora Opina Argentina, basada en 1.838 casos relevados entre el 1 y el 4 de noviembre.

Según el estudio, después del resultado electoral se observó una recuperación significativa de las expectativas económicas y políticas, junto con una mejora en los indicadores de imagen presidencial. Milei logró revertir una tendencia negativa que se extendía desde hacía cuatro meses: su imagen positiva creció ocho puntos, mientras que la negativa retrocedió. Actualmente, el mandatario cuenta con 48% de valoración favorable y 52% desfavorable, reduciendo así la brecha y mostrando un leve repunte de confianza.

En el ranking de imagen positiva, Milei encabeza la lista, seguido por la ministra de Seguridad y senadora electa Patricia Bullrich, quien también muestra una evolución favorable: su imagen positiva subió cuatro puntos y se ubica en 47%, con una negativa de 53%. Detrás se posicionan Mauricio Macri (45% y 55%), el ministro de Economía Luis Caputo (42% y 55%), Axel Kicillof (41% y 58%), Cristina Fernández de Kirchner (37% y 63%), Sergio Massa (36% y 63%) y la vicepresidenta Victoria Villarruel (32% y 64%).

La encuesta también refleja un cambio en la percepción general sobre el rumbo del país. Un 42% de los consultados considera que la Argentina está mejor que el año pasado, un 9% cree que se mantiene igual y un 48% opina que está peor. En comparación con mediciones previas, crece la proporción de quienes perciben una mejora (del 34% al 42%) y cae la de quienes creen que la situación empeoró (del 55% al 48%).

En conjunto, los datos muestran un rebote en la confianza social hacia la gestión de Javier Milei, impulsado por el triunfo electoral y por la sensación de que el país comienza a estabilizarse. El desafío del Gobierno, ahora, será sostener ese clima de expectativa positiva y consolidar los avances económicos que el oficialismo considera claves para la nueva etapa.