Tras las idas y vueltas por la organización del operativo, en la zona finalmente actuarán las Fuerzas Federales en conjunto con la Policía de la Ciudad.
Los jubilados realizan una nueva marcha al Congreso de la Nación este miércoles. En la víspera al paro general anunciado para el jueves, a la movilización se suman la Confederación General del Trabajo (CGT), con la adhesión de las dos facciones de la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA), columnas piqueteras, movimientos sociales y partidos de izquierda. En este marco, desde temprano en la mañana se desplegó un importante operativo de seguridad en la zona.
Una de las veredas de la Plaza del Congreso amaneció totalmente vallada, en particular sobre el cordón de la avenida Entre Ríos. En el lugar también estaban dispuestas otras cientos de vallas a colocar frente a la fachada del Congreso de la Nación, las cuales serán instaladas cerca del mediodía con el fin de proteger al palacio legislativo en caso de que se generen disturbios.
Una de las primeras fuerzas de seguridad en llegar a la zona fue Gendarmería Nacional.
Tras las idas y vueltas de los últimos días, el operativo finalmente estará a cargo de Nación junto a Ciudad. Se prevé que en la vereda del Congreso actúen las Fuerzas Federales, mientras que el accionar sobre las calles linderas estará organizado por la Policía de la Ciudad.
El Ministerio de Seguridad de la Nación, a cargo de Patricia Bullrich, informó que, para mantener el orden público, este miércoles se desplegará un operativo especial donde cada fuerza actuará en diferentes sectores.
Según se detalló, las Fuerzas Federales, como Policía Federal, Prefectura Naval, Gendarmería Nacional y Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA), "se ocuparán de la seguridad del Edificio apostados de un lado del vallado", en referencia al Congreso de la Nación, mientras que la Policía porteña se ocupará de la seguridad en las calles.
A su vez, desde el mediodía se realizarán cortes de tránsito en toda la zona del Congreso conforme vaya avanzando la movilización.
El lunes, el juez Roberto Gallardo hizo lugar a una medida cautelar y ordenó que sea el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires el que esté a cargo del operativo de seguridad de la próxima marcha de los jubilados a la que este miércoles se sumarán los gremios agrupados en la CGT.
Gallardo hizo lugar a recursos de amaro presentados por varios gremios nucleados a la CGT y a la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP), quienes pidieron "evitar la participación de fuerzas federales" en el operativo de este miércoles.
De esta forma, el juez le ordenó al Gobierno de la Ciudad y a su jefe porteño, Jorge Macri, que se "abstenga" de validar la intervención de fuerzas de seguridad nacionales, por fuera de los ámbitos establecidos en la Ley de Seguridad Interior, "en detrimento de la autonomía local y del rol de la Policía de la Ciudad".
De esa manera, el magistrado sentenció que la administración de Macri sea la que esté a cargo del operativo de seguridad de este miércoles 9, delimitando el ámbito de intervención y jurisdicción en la Ciudad de las fuerzas federales que están a cargo de la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich.
Sin embargo, ayer martes, el Gobierno porteño, a través de la Procuración General, pidió que se anule el fallo del juez Gallardo.
El recurso presentado considera improcedente la medida dictada por "la evidente falta de constatación de requisitos legales para su procedencia, la arbitrariedad de la medida y la ostensible falta de fundamentación del apartamiento del debido proceso legal y por afectar la división de poderes".
En los fundamentos expuestos por la Procuraduría se sostiene que la resolución del juez Gallardo es "nula" y que la medida fue resuelta sin la intervención previa del Gobierno de la Ciudad ni se garantizó el derecho de defensa.
El Gobierno porteño también recordó que la Ciudad "ha asumido la responsabilidad primaria e indelegable en el diseño, planificación y ejecución de los operativos de seguridad en su territorio, incluyendo la zona adyacente al Congreso de la Nación, con la sola excepción de los denominados "objetivos federales".
En dichas instancias, "se nos informó que las fuerzas federales establecerán un perímetro acotado para la protección específica del edificio del Congreso Nacional, comprendido entre las calles Av. Hipólito Yrigoyen, Av. Rivadavia, Combate de los Pozos y Solís. Dentro de ese perímetro, se instalarán vallados y se desplegará personal exclusivamente en función de su competencia federal", explicó CABA.