Avenida de Mayo fue cerrada al tránsito y las inmediaciones del Palacio Legislativo están valladas y con presencia de móviles; esperan la llegada de barrabravas con camisetas argentinas.
El operativo de seguridad para la marcha prevista para hoy a la tarde en las inmediaciones del Palacio Legislativo comenzó a unas 40 cuadras de la zona de la convocatoria, en las estaciones de trenes de Retiro, donde desde antes de las 8 personal de la Policía Federal Argentina (PFA) controlaba y supervisaba la llegada de posible manifestantes.
La situación se repetía en las estaciones de los ferrocarriles Mitre, Belgrano Norte y San Martín. Había personal uniformados y agentes de civil que solo llevaban puesto un chaleco con las siglas PFA.
"Es un control. Se espera que la mayor cantidad de gente venga después de las 15", dijo a LA NACION uno de los policías.
En Constitución, en tanto, la presencia policial era menor, y también lo era la cantidad de pasajeros que circulaban por la cabecera del ferrocarril Roca. Un policía a cargo del operativo en esa estación dijo a LA NACION que esperaban la llegada de las primeras columnas de manifestantes identificables a partir del mediodía.
En el eje de la 9 de Julio, especialmente en la bajada de la autopista desde el sur -es decir, desde el Puente Pueyrredón, histórica plataforma de entrada de las columnas políticas-, el panorama era el habitual, con tránsito normal y sin presencia de ómnibus o transportes que denoten la llegada de manifestantes organizados.
A las 10.15, las inmediaciones del Congreso estaban valladas y con el tránsito restringido, solo se puede transitar la zona a pie. Las vallas se colocaron en Alsina y Entre Ríos; Rivadavia y Callao; Callao y Mitre; Hipólito Yrigoyen y Entre Ríos; Yrigoyen y Combate de los Pozos, y Rivadavia y Ayacucho.
En Avenida de Mayo y 9 de Julio un vehículo del Cuerpo de Tránsito de la Ciudad había cortado el tráfico en dirección al Congreso. A media mañana habían completado el bloqueo con vallas plásticas.
Desde las 7 comenzaron a llegar los grupos de la PFA, la Gendarmería, la Prefectura y la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA).
La zona aparece blindada con patrulleros, camionetas, motos y camiones hidrantes. A media mañana arribaron a la zona dos camiones de transporte de detenidos del Servicio Penitenciario Federal (SPF).
Varios comerciantes de la zona decidieron no abrir ante el temor de que se produzcan incidentes esta tarde. Otros evalúan cerrar sus puertas cuando se concentre la mayor cantidad de manifestantes, a partir de las 15.
"Para prevenir vamos a cerrar. Te roban o te rompen todo", dijo a LA NACION un verdulero que tiene su local en avenida de Mayo al 1300.
Celeste, una quiosquera vecina, afirmó:"Vamos a cerrar cuando sea la hora pico".
No solo la zona del Congreso parece blindada por personal uniformado, también se nota presencia de integrantes de fuerzas de seguridad que están de civil. Además de las fuerzas federales, que dependen del Ministerio de Seguridad Nacional, en el operativo participa la Policía de la Ciudad con 900 oficiales.
La coordinación del operativo de seguridad en la zona del Congreso estará a cargo de un Comando Unificado de las fuerzas federales que funcionará en el Ministerio de Seguridad Nacional, en la calle Gelly y Obes. Desde allí, Patricia Bullrich seguirá las alternativas de la marcha y el desarrollo del operativo.
Ese Comando Unificados es un triángulo con tres vértices que se enfocarán en distintos ejes de la marcha: la cuestión operativa, que se ocupará de ordenar los desplazamientos de los distintos grupos de efectivos a partir de los lugares donde se registren incidentes; la cuestión judicial, que se encargará de redactar de forma precisa las actas de captura y detención para evitar situaciones como las que describió la jueza Karina Andrade cuando dispuso las libertades de los 114 detenidos en la manifestación del miércoles pasado, y la de identificación, en la que otro grupo tendrá la misión de revisar las imágenes de las cámaras de seguridad y de los dispositivos de los móviles afectados al operativo para tratar de encontrar activistas o barrabravas con pedidos de captura.
Esos grupos de trabajo forman parte del Comando Unificado fueron denominados como la mesa operativa, la mesa de inteligencia y la mesa judicial.
Los seguimientos a través de las cámaras de seguridad serán clave para identificar a los responsables de los eventuales incidentes. Existe información de inteligencia que indicaría que los barrabravas concurrirán a la marcha con camisetas del seleccionado argentino de fútbol para dificultar su identificación, tal como ocurrió con Fernando David Yurquina, el integrante de una facción de la barra brava de All Boys arrestado por haber participado del ataque en el que fue incendiado un móvil de la Policía de la Ciudad en la violenta manifestación de la semana pasada.
Informes de María Cabrera y Gustavo Schaposnik / La Nación