Se trata de una actuación de rigor para deslindar responsabilidades, informaron fuentes de la fuerza y de Seguridad; la ministra había dicho que el agente "tiró al granada correctamente" y que no lo iban a juzgar
Así lo informaron calificadas fuentes del Ministerio de Seguridad y de la Gendarmería Nacional ante la consulta de LA NACION. "Sí, se abrió una actuación interna a cargo de la División Asuntos Internos", dijeron los voceros consultados. Otra fuente, que trabajaba codo a codo con Bullrich, dijo: "La Gendarmería Nacional abrió un sumario interno para investigar la lesión que sufrió Grillo".
En las últimas horas, Bullrich, que dijo que no iban a juzgar a ningún agente por los hechos del miércoles pasado, afirmó: "La Gendarmería Nacional, la Policía Federal y el Centro de Ciberseguridad del Ministerio de Seguridad está haciendo la reconstrucción para demostrar que se tiró de acuerdo a los protocolos". Lo sostuvo ayer, en una conferencia de prensa en la Casa Rosada donde presentó denominado proyecto ley Antibarras, que tiene como objetivo declarar a los barrabravas como una forma específica de asociación ilícita.
Bullrich volvió a negar que la cápsula de gas lacrimógeno que hirió a Grillo haya sido disparada de forma horizontal, como lo muestran distintas filmaciones, y ratificó que el proyectil se arrojó "como dicen los manuales", de forma oblicua.
Pero a pesar de las afirmaciones de Bullrich, el propio Ministerio de Seguridad de la Nación, en la denuncia que presentó ante la Justicia para que se investiguen delitos como "sedición, atentado contra el orden constitucional y la vida democrática y asociación ilícita", afirmó: "Grillo, que se encuentra internado en el Hospital Ramos Mejía, fue herido en su cabeza aparentemente por un proyectil de gas lacrimógeno que habría sido lanzado con trayectoria horizontal desde una distancia alejada del lugar donde se encontraba el fotógrafo, que estaba ubicado detrás de un objeto incendiado, en el cruce de los proyectiles que arrojaban las personas violentas que estaban detrás suyo".
Y a pesar de que en las imágenes de las filmaciones no se advierte, Bullrich repitió que antes de impactar en el fotógrafo, el proyectil rebotó en dos oportunidades. "Todos los gendarmes tiran como tienen que tirar", sostuvo Bullrich.
Ayer, el abogado Fernando Soto, director de Normativa del Ministerio de Seguridad y funcionario clave de Bullrich, dio anoche una nueva explicación sobre el camino del proyectil: "Tuvo una trayectoria horizontal, pero producto necesariamente de un rebote previo y un rebote posterior". Soto fue quien firmó la denuncia que había dicho que el proyectil "habría sido lanzado con trayectoria horizontal". Ayer, insistió: "No es que podés apuntar como una 9 milímetros: vos no sabés dónde va. Es como una cañita voladora, que sale más o menos para un lugar. Entonces la trayectoria no fue horizontal, se produjo horizontal en el rebote y tuvo otro rebote en el artefacto incendiado frente a donde estaba Pablo Grillo".
"Los cartuchos de las armas lanza gases, mal llamadas armas no letales, nunca se disparan en forma recta. Siempre en forma de 'parábola' a 45 grados porque pueden ser mortales", explicó a LA NACION un experimentado jefe policial.
Tras una consulta de LA NACION, en el Ministerio de Seguridad Nacional no respondieron sobre la investigación iniciada por la División Asuntos Internos de la Gendarmería Nacional.
Pero una fuente al tanto de cómo funcionan los controles internos de las fuerzas de seguridad explicó a LA NACION: "La investigación interna es de rigor. Siempre que hay actividad de arma de fuego letal o no letal, siempre hay una actuación administrativa porque es para deslindar responsabilices. Después se puede transformar en un sumario administrativo que puede terminar con una sanción por parte de la fuerza de seguridad. Actúa la misma fuerza y, eventualmente, se secuestra armamento para ponerlo a disposición de la Justicia".
Y agregó: "También es de rigor que el armamento es separado por la fuerza para ponerlo a disposición de la Justicia, porque si hay una investigación judicial abierta es casi seguro que se ordene el secuestro del arma", explicó.
Una fuente del Ministerio de Seguridad sostuvo: "La ministra Bullrich afirmó de que no iba a haber sanción para el gendarme que disparó. Eso será después con el sumario administrativo, pero antes tiene que haber una actuación sumarial obligatoria. Se hace siempre porque la 'no sanción' tiene que tener como base un informe previo hecho por la fuerza".