El líder de Pro dejó en claro que si bien la Ciudad "está para ayudar", las alcaldías "no son cárceles" y tanto la cartera de Seguridad como el Servicio Penitenciario Federal "tienen que cumplir con su responsabilidad"; la respuesta de Bullrich.
El expresidente Mauricio Macri, en un posteo realizado a través de sus redes sociales, interpeló a la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y reclamó el traslado de los detenidos en comisarías de la Ciudad de Buenos Aires a cárceles del Servicio Penitenciario Federal (SPF). Sin nombrarla directamente, Macri apuntó a la ministra y coincidió con el planteo de su primo, el jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, quien también había expresado su preocupación por la situación en un acto reciente.
Macri sostuvo que la Ciudad de Buenos Aires tiene la responsabilidad de "ayudar" en la cuestión, pero recalcó que las comisarías "no son cárceles" y que tanto el Ministerio de Seguridad como el SPF deberían asumir su responsabilidad en el traslado de los detenidos. En su publicación, el líder del Pro subrayó que los casi 27.000 policías de la Ciudad están para "cuidar las calles, no a los presos", haciendo hincapié en la necesidad de resolver el problema de la sobrepoblación en las comisarías porteñas, que actualmente albergan a miles de detenidos.
La respuesta de la ministra Bullrich no se hizo esperar. A través de un mensaje crítico, le reprochó a Macri que, durante su gestión como presidente, no se cumplieron con los compromisos previos para trasladar a los detenidos al sistema penitenciario federal. "Tu primo tiene sobre su escritorio un convenio de transferencia que, como se hizo con la Policía de la Ciudad, se puede resolver en pocos días", señaló Bullrich, refiriéndose a Jorge Macri, en un escrito difundido por el diario La Nación.
La ministra también recordó que en 2018, durante la presidencia de Macri, se firmó un convenio para que la Ciudad se quedara con el terreno de la cárcel de Devoto, a cambio de construir una nueva cárcel en Marcos Paz. Sin embargo, Bullrich acusó a la Ciudad de incumplir con el compromiso de construir la nueva prisión, lo que derivó en un aumento de la población carcelaria en las comisarías porteñas.
En cuanto a la administración de la obra, Bullrich señaló que el gobierno de Horacio Rodríguez Larreta y el de Jorge Macri no lograron avanzar con el proyecto durante años, lo que provocó retrasos y un incremento en el número de presos en las comisarías de la Ciudad. La ministra aseguró que el gobierno nacional ofreció diversas soluciones, como la construcción de modulares y el envío de detenidos a otras provincias, pero que la Ciudad rechazó estas opciones.
Bullrich también destacó que, a pesar de los retrasos y la acumulación de presos, el gobierno nacional ya había avanzado en una carta de entendimiento para transferir tanto a los detenidos como a los establecimientos penitenciarios de la Ciudad al SPF. Según la ministra, este acuerdo está listo para firmarse, y criticó la actitud del gobierno porteño, al que acusó de no asumir la responsabilidad de la situación.
"Hoy, por cinco años de desidia, se les acumularon más de 2.000 presos, y tú me pides que me los lleve. ¿Dónde los llevaría si la cárcel que debía construirse no se hizo?", preguntó Bullrich, advirtiendo que la sobrepoblación carcelaria en las comisarías de la Ciudad se ha convertido en un problema complejo que debe ser resuelto de manera urgente.
La situación de los detenidos en las comisarías de la Ciudad de Buenos Aires ha generado un intenso debate político y de gestión, y la respuesta de Patricia Bullrich refleja la tensión existente entre la Nación y la Ciudad en cuanto a la seguridad y la administración penitenciaria. Mientras tanto, la sobrecarga de los establecimientos policiales sigue siendo una preocupación urgente, con más de 2.000 personas detenidas en comisarías porteñas a la espera de una solución.
El conflicto se mantiene abierto, y la resolución de la situación dependerá de la capacidad de las autoridades de ambos niveles de gobierno para llegar a un acuerdo y poner en marcha las medidas necesarias para evitar el colapso del sistema.