El Tiburón mostró un gran nivel colectivo a lo largo del encuentro, aprovechando al máximo las oportunidades que se le presentaron. Los goles que sellaron su triunfo fueron obra de Nicolás Laméndola y Elías Torres, quienes dieron rienda suelta a la euforia de los hinchas presentes que coparon Rosario para seguir de cerca los pasos de un equipo que fue de menor a mayor durante toda la competencia.

El equipo dirigido por Andrés Yllana había llegado a esta final tras clasificar primero en la Zona B, en una definición apasionante que destacó su capacidad de lucha y compromiso en todos los encuentro. Ahora, tras este triunfo, el "Tiburón" vuelve a la Liga Profesional de Fútbol en búsqueda de la estabilidad durante mucho años.

Por otro lado, San Martín de Tucumán, que había tenido una destacada campaña en la Zona A al finalizar primero con 81 puntos, no pudo replicar su dominio en esta instancia decisiva. A pesar de su sólida performance, que incluyó 24 triunfos, 9 empates y 5 derrotas, el "Santo" tucumano recibió un duro golpe. Sin embargo, no todo está perdido: a pesar de esta derrta se clasificó a los cuartos de final del Reducido, donde tendrá una nueva oportunidad de luchar por el ascenso.

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