El ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, anticipó que esta mañana que la reforma laboral incluida en la Ley Basesse implementará a partir de fines de la próxima semana o comienzos de la siguiente.

El funcionario subrayó la importancia de la reforma laboral como un paso fundamental para dinamizar la economía y fomentar la creación de empleo, en donde se introducirá un nuevo marco legal que permita la negociación individual entre empleadores y empleados.

"Esta es una reforma laboral que va a prosperar si los actores de cada sector son suficientemente inteligentes para que sea mejor para ambas partes. Es un cambio radical del paradigma. Si no ganan los dos no sirve", dijo el ministro.

Sturzenegger mencionó que "antes, cuando despedías a alguien, tenías el riesgo laboral implícito en donde el riesgo era que te podían poner unas penalidades muy grandes. El Congreso decidió eliminarlos. El artículo 94 de la Ley Bases, que se llama injuria grave, incorpora la figura del bloqueo. La mayoría de los gremios no lo hacen, pero se incorporó el tema de que si bloqueás la producción o si le impedís a una persona acceder a su puesto de trabajo se categoriza como injuria grave".

Luego agregó: "Si tenés una pequeña pyme, podés contratar la figura del trabajador independiente sin tener un riesgo legal ahí".

En declaraciones a radio Mitre, Sturzenegger indicó que "la parte más importante está en el artículo 96, el cual le va a permitir a trabajadores y empleadores definir el régimen indemnizatorio".

"Tiene que generar todo lo contrario al miedo. Hasta hoy existió una reforma laboral pro empresarios y otra pro trabajadores. El Presidente (Javier Milei) nos dijo que hagamos una reforma laboral solo si es buena para las empresas y buena para los trabajadores", indicó.

"Acá hay un tercero en discordia que es la industria del juicio, la tremenda incertidumbre legal que tiene una contratación. Si ellos se ponen de acuerdo en un mecanismo beneficioso, porque elimina al tercero en discordia, deja un amplio espacio para que la empresa y los trabajadores estén mejor", sostuvo el ministro.

Sturzenegger explicó que cuando las cúpulas (tanto de las empresas como de los gremios) negocien esto, ambos podrán no aceptar la posición de enfrente. "Y si a un trabajador no le gusta, se queda con la ley de contrato de trabajo. Van a tener libertad absoluta para armar lo que ellos quieran", dijo.

"Con todo lo que es el stock de trabajadores en este momento, solo vas a poder pasar al sistema si tanto la empresa como el trabajador están de acuerdo. A nadie se le va a obligar a ir a este sistema si no está de acuerdo. No es una negociación individual, es del convenio colectivo", completó.